Páginas

sábado, 20 de julio de 2013

2. Cristina

Cristina Casas lleva toda la vida viviendo allí. Tiene 16 años y tiene una vida bastante normal. No tiene muchos amigos. Tan solo a Maia, su mejor amiga, Nuria, Blanca y Cristian.

Cristina era una chica morena de pelo largo y ondulado. Era delgada y guapa y sus ojos eran marrones claros. Tenían un color bastante peculiar porque cuando le daba el sol, sus ojos parecían dorados. Ella siempre había vivido allí, en Barcelona, por eso le encantaba ir a la playa. Era lo que más le gustaba, ir a la playa con Maia, Nuria, Blanca y Cristian.

Quedaba muy poco para que empezaran las clases de nuevo y ella solo podía pensar en pasarlo bien y disfrutar de lo poco que quedaba de verano. De hecho, eso estaba haciendo en ese preciso instante. Estaba en la playa, en la arena con Maia. Pensar que todo volvería a empezar en nada...
-Puff, bachillerato... - suspiró Maia.
-Puff, bullying...
-No digas eso. Tan solo fue el año pasado.
-Maia, el año pasado fue la peor época de mi vida. La gente puede llegar a ser muy cruel.
-Lo sé. Yo estuve ahí.
-No tendrías que haberte metido. Al final acabamos las dos igual...
-No, acabamos los cinco. Nuria, Blanca y Cristian no dudaron en ayudar.
-Ya pero...
-Tú habrías hecho lo mismo.
-Cierto. Pero se pasaron conmigo.
-Mira, vamos al agua con el resto que no creo que debamos hablar de esto ahora, ¿vale?
-Vale...

Tras un rato chapoteando, salieron del agua y se fueron a casa de Cristina. Las chicas se cambiaron de ropa y Cristian se quedó observando la habitación de Cristina.
-¿Todavía tienes ese póster? - preguntó cuando las chicas salieron del baño.
-Sí - respondió Cristina al mirar el póster -, ¿no lo ves?
Se rieron.

Al cabo de un rato, todos se fueron excepto Maia. Estuvieron recordando lo que había pasado el año anterior para convencerse de que no podía haber un año peor, de que era imposible.
-¿Tan fea soy? - le preguntó Cristina a Maia.
-No eres fea. ¡Ni de coña! Que digas yo, vale. ¿Pero tú? Cris eres preciosa.
-Gracias - dijo sonriendo un poco sonrojada - Tú no eres fea. Así que no lo repitas.
Se abrazaron y al final Maia se fue. Cristina escribió en su diario como cada día y pegó una nueva foto de un día de playa con sus amigos. "Mi vida no es tan mala", pensó. Abrazó su diario abierto por esa página y se tumbó en la cama. Se durmió.

Continuará...

No hay comentarios:

Publicar un comentario